Un destino junto al mar muy querido, donde locales y viajeros se reúnen para saborear los sabores de la región. Cada mañana comienza con desayunos vibrantes que despiertan los sentidos, desde pasteles recién horneados hasta frutas tropicales y reconfortantes platillos tradicionales. A medida que avanza el día, el menú celebra la riqueza de la costa mexicana: ceviches frescos, tacos perfectamente sazonados, mariscos a la parrilla jugosos y especialidades regionales elaboradas con cuidado y creatividad. Cada plato es un homenaje al mar, a la tierra y a las vibrantes tradiciones culinarias de la región. Casual, acogedor y deliciosamente auténtico, este es un lugar donde cada comida se convierte en una celebración y cada visita se siente como volver a casa.
Bienvenido a La Zebra
La Escapada Perfecta a la Playa
Desde hace más de 20 años, La Zebra ha sido uno de los pioneros de Tulum, recibiendo viajeros de todos los rincones del mundo en sus impresionantes orillas. Mucho antes de que Tulum se convirtiera en el destino de renombre mundial que es hoy, La Zebra ya estaba aquí: enraizada en las arenas blancas, abrazada por el Caribe turquesa y compartiendo la magia de este paraíso que alguna vez fue escondido con quienes buscaban algo verdaderamente especial.
A lo largo de los años, La Zebra se ha convertido en un refugio alegre, vibrante y lleno de vida. Es un lugar donde las familias se reúnen para crear recuerdos que durarán toda la vida, donde las parejas encuentran el escenario perfecto para el romance, y donde los grupos de amigos ríen, celebran y generan historias que contarán por años. No es solo un hotel: es parte del espíritu original de Tulum, un reflejo del lujo descalzo, la calidez mexicana y el ritmo alegre del mar. La Zebra encarna la esencia misma de las vacaciones perfectas en una playa mexicana, esas que se sienten atemporales y naturalmente libres.
De este legado de alegría y celebración nace Lula by La Zebra. Lula representa la alegría de vivir, la serenidad del mar y la energía radiante del sol. Juntas, La Zebra y Lula crean un refugio atemporal donde la herencia se encuentra con la espontaneidad, donde la tradición y la diversión conviven, y donde cada estancia se convierte en una historia digna de ser recordada. Aquí, en las mágicas orillas de Tulum, la libertad, la alegría y la conexión no son solo promesas: son una forma de vida.









